viernes, 27 de noviembre de 2009

FAMILIA Y NATURALEZA



Palabras pronunciadas por el LAE. Enrique Uribarren Castro, Presidente del Observatorio Ciudadano de Protección Ambiental de Querétaro, en el Decimo cuarto Encuentro Latinoamericano del Movimiento Familiar Cristiano

Agradezco cumplidamente a Doña Rosalinda y Don Jorge Carrillo y a todos los organizadores de este importante encuentro titulado “La familia comprometida con la Iglesia, la Naturaleza y la Sociedad a la luz de Aparecida”, la inmerecida oportunidad que me brindan de dirigirme ante ustedes.

Es para mí motivo de gran satisfacción participar en este evento, en el cual tendremos la oportunidad de reflexionar entre otros temas, sobre nuestro compromiso como Católicos con la naturaleza.

En este contexto, deseo expresar mi más sincero reconocimiento al Movimiento Familiar Cristiano, y particularmente a todos los que con su comprometido esfuerzo han hecho posible la realización de este evento, el cual nos permitirá ver los principales problemas de nuestro medio ambiente, juzgar nuestro papel y el de nuestras familias en torno a ellos, para finalmente actuar de manera concreta en soluciones, que por ende, nos permiten trabajar en la consecución del bien común y la justicia social.

Partiendo de la pedagogía utilizada por ustedes en el Movimiento, de ver, juzgar y actuar, iniciemos viendo la condición actual de nuestro entorno ambiental.

Ver implica contemplar a Dios y la grandeza de su obra plasmada en la creación. La naturaleza es sin duda, la máxima expresión de la arquitectura divina, es perfecta, ordenada, donde cada elemento en sus distintas escalas y volúmenes que la componen, cumple una función, nada sobra, es en su conjunto un engranaje que propone, genera y sustenta vida en sus distintas formas.

América Latina es la región del planeta que posee una de las mayores biodiversidades del mundo y una rica socio diversidad, representada por sus pueblos y culturas.
Una muestra de lo anterior, es que en nuestras tierras están los acuíferos más abundantes del planeta, junto con grandes extensiones de territorio selvático, que son pulmones de la humanidad. Así, se dan gratuitamente al mundo servicios ambientales.

La Amazonia panamericana ocupa un área de 7 millones de kilómetros cuadrados y corresponde al 5% de la superficie de la Tierra, sin embargo, en ella se alberga el 20% de la disponibilidad mundial de agua dulce no congelada; el 34% de las reservas mundiales de bosque; el 30% de todas las especies de la fauna y flora del mundo. Su diversidad biológica de ecosistemas es la más rica del planeta.

En el caso particular de México, la variedad de ecosistemas que subsisten en nuestro territorio nacional, le permiten contar con una biodiversidad que coloca a mi país dentro de los 10 países mega diversos a nivel mundial.

Los recursos naturales de México los podemos sintetizar de la siguiente manera:

Segundo lugar mundial en número de ecosistemas; el Cuarto lugar mundial en biodiversidad biológica con 3,032 de las especies de vertebrados conocidas en el planeta; el cuarto lugar mundial de Anfibios con 295 Especies; primer lugar mundial de Reptiles con 705 Especies; 1,060 Especies de Aves, ubicándonos en décimo primer lugar mundial; quinto lugar mundial de Mamíferos con 466 especies de ellos; El sexto lugar en patrimonio natural de la humanidad; El tercer lugar en diversidad cultural y diversas lenguas pertenecientes a importantes grupos étnicos; Quinto lugar en especies de plantas.

Esta enorme riqueza natural de vida, es como lo señala el punto 125 del Documento Conclusivo de Aparecida, “manifestación del amor providente de Dios” la cual “nos ha sido entregada para que la cuidemos y la transformemos en fuente de vida digna para todos”.

Dios mismo nos ha encomendado la obra de sus manos para que la cuidemos y pongamos al servicio de todos, por ende, el ser humano, en todo tiempo, ha sido llamado a convertirse en el Ángel guardián y celoso cultivador de la creación, y no en su destructor.

Sin embargo, el pecado ha mancillado la creación en su belleza original, y atenta contra la biodiversidad y, en definitiva, contra la vida misma.

De acuerdo con los resultados de los cuestionarios que en sus países fueron contestados sobre el tema Familia y Naturaleza, La problemática medioambiental es la misma en nuestros países:

Legislación inadecuada para garantizar el cuidado de la naturaleza, deficientes instalaciones para prevenir el deterioro ambiental, destrucción de la ecología con fines de lucro, contaminación de ríos, aire y tierra, deforestación, falta de formación ecológica, etc.

Pienso que, ahora estamos sensibilizados con el tema medioambiental por problemas como los ocasionados por el cambio climático, sin embargo, en muchas ocasiones nosotros mismos nos preguntamos ¿Qué tengo yo que ver con esos problemas? Nuestras ocupaciones diarias con sus problemas propios nos mantienen inmersos en nuestro microcosmos, sin darnos el tiempo necesario para pensar seriamente en la importancia de preservar nuestro entorno natural.

En buena medida este es el resultado de la lógica del modelo globalizador postmoderno que nuestros países están adoptando, el cual se fundamenta en un modelo cultural individualista orientado al consumo como un medio para alcanzar la felicidad y la satisfacción hedonista.

Este modelo individualista y hedonista, debilita los vínculos comunitarios y por ende, la solidaridad, llevándonos a un estado de indiferencia por el otro y sus necesidades, considerando al prójimo como alguien a quién no se necesita y ni del cual tampoco debemos sentirnos responsables, permitiendo con ello el aprovechamiento irracional de la naturaleza, sin pensar en las futuras generaciones y que se está quebrando el frágil equilibrio de la Tierra, construido con gran sabiduría a lo largo de 15,000 millones de años.

Pareciera que hemos olvidado por completo que el Señor nos ha entregado el mundo para todos, para las generaciones presentes y futuras. Hemos perdido de vista que el destino universal de los bienes exige la solidaridad de todos y cada uno de nosotros, ya que los recursos son cada vez más limitados y su uso debe estar regulado según el principio de justicia distributiva respetando el Desarrollo Humano Sustentable.

Cuando en 1984 el Worldwatch Institute de los Estados Unidos, publica su informe sobre el “estado de la Tierra”, este es cada vez más alarmante. Una conclusión es que la Tierra está enferma y amenazada. Algunas de las consideraciones en que se fundamenta la anterior afirmación son las siguientes:

De acuerdo con los criterios de los especialistas, las diversas formas de vida existentes en nuestro planeta, desde la más simple hasta la más compleja como lo es el hombre, oscilan entre los 10 y los 100 millones, de las cuales han sido descritas 1.4 millones.

Cálculos estimativos afirman que entre los años 1500 y 1850 presumiblemente se eliminó de la faz de la tierra una especie de vida cada 10 años. Entre 1850 y 1950, se incrementó a una especie por año. En el lapso comprendido de 1990 al año 2000, desapareció del planeta una especie por día. A partir del año 2000 está desapareciendo una especie por hora.

El Fondo Mundial de la Naturaleza, recientemente ha dado a conocer que la Tierra ha perdido en poco más de un cuarto de siglo casi la tercera parte de su riqueza biológica y recursos, advirtiendo que de seguir a este ritmo la humanidad necesitará dos planetas en el 2030 para mantener este estilo de vida.

Además, constatamos el retroceso de los hielos en todo el mundo: el deshielo del Ártico, cuyo impacto ya se está viendo en la flora y fauna de ese ecosistema; también el calentamiento global se hace sentir en el estruendoso crepitar de los bloques de hielo antártico que reducen la cobertura glacial del Continente y que regula el clima del mundo.

Hace 22 años, en 1987 Juan Pablo II desde el confín de las Américas en el Cono Sur, lanzo un llamado para proteger y conservar la naturaleza creada por Dios, diciendo: “No permitamos que nuestro mundo sea una tierra cada vez más degradada y degradante”.

Con este panorama concluyo la etapa del ver, para pasar a la etapa de juzgar, que implica asumir nuestra responsabilidad ante el deterioro ambiental concreto de nuestras naciones.

El actual modelo de desarrollo descrito hace unos momentos, está llevando a nuestros pueblos a adoptar nuevas formas de vivir, de consumir, de actuar, es totalmente irresponsable y devastador con el medio ambiente y sus recursos y ha creado una manifestación más de la “Cultura de la muerte”, dirigida en contra de la vida ahora bajo sus más variadas formas.

Con gran visión Juan Pablo II en su mensaje de la Jornada Mundial por la Paz de 1990afirmaba que “La sociedad actual no hallará una solución al problema ecológico si no revisa seriamente su estilo de vida. En muchas partes del mundo esta misma sociedad se inclina al hedonismo y al consumismo, pero permanece indiferente a los daños que éstos causan.”

Por ello, es imprescindible vencer a esta cultura de la muerte con la cultura de la vida. Y es precisamente en este punto, donde el papel de la familia cristina cobra una vital relevancia, como ya lo decía el Papa Juan Pablo II en su encíclica Centessimus annus: “El gran antídoto de la cultura de la muerte, es la familia”.

Hoy precisamente por ser la familia el gran antídoto y promotora de la cultura de la vida, es que está sufriendo de los embates y ataques por todos los ángulos de los promotores de la cultura de la muerte, poniéndola en peligro como lo alerta SS. Benedicto XVI.

Con lo cual en la actualidad no sólo afrontamos severos riesgos ambientales, sino también familiares. Para poder sortearlos de manera exitosa, si en verdad queremos proteger el medio ambiente, se requiere que protejamos a las familias cristianas, tomando en consideración los que también nos señala la encíclica Centessimus annus, cuando establece que para aspirar a un genuino rescate de la ecología, se debe poner en el centro a la persona humana y la familia.

En este sentido es menester, que tengamos la claridad de que los cambios que se requieren para mejorar las condiciones ambientales de nuestro planeta, no surgirán de los políticos, de los que en la actualidad toman las decisiones, que ya hemos visto cual erradas son, sino de la sociedad y para ser más específicos de su célula básica, la familia, capaz de promover los auténticos valores que se requieren para cambiar las estructuras de injusticia y deterioro que vivimos, pues resulta innegable que existe una interacción permanente entre las personas y su ambiente, así como ahora nuestra forma de vida ha sido influida por nuestro entorno natural y cultural, hoy tenemos la oportunidad de que nuestras acciones modifican el ambiente y el entorno social.

SS Benedicto XVI en la encíclica Caritas in veritate resalta que solo la familia "puede garantizar una educación auténtica en valores humanos". En consecuencia, la primera estructura fundamental a favor de la “ecología” es la familia, en cuyo seno el hombre recibe las primeras nociones sobre la verdad y el bien.

De igual manera, en su mensaje para la Jornada Mundial de la Paz en el 2008, El Papa Benedicto XVI, relanzó el papel del hombre, la familia y la educación para mejorar las condiciones de la humanidad y salvaguardar lo creado.

En este orden de ideas, es pertinente retomar al Documento Conclusivo de Aparecida, el cual nos recuerda que el campo específico de la actividad evangelizadora laical y por ende, de la mayoría de nosotros es en los ámbitos de la familia, la educación y la vida profesional. En este sentido en su punto 126 nos señala: “La mejor forma de respetar la naturaleza es promover una ecología humana abierta a la trascendencia”.

En el rubro de la familia algo que deseo destacar ante ustedes es el hecho de que, los padres debemos tomar plena conciencia de nuestra gozosa e irrenunciable responsabilidad en la formación integral de nuestros hijos.

En este sentido debemos poner particular interés en los jóvenes, que hoy son los principales activistas en las causas ambientales, pero también son los más sensibles a los cambios culturales que estamos viviendo y son a los que más afectan.

En el ambiente cultural predominante el cual ofrece modelos de hombre económico, consumidor y hedonista, resulta fácil proponer a los jóvenes distracciones que generan mayor consumo – contribuyendo con ello a la degradación ambiental – o en entretenimientos alienantes que producen satisfacciones efímeras. Y es a ellos particularmente, si queremos darles un futuro mejor, un medio ambiente mejor, tenemos que ayudares a comprometerse con grandes ideales, que mejoren a nuestro planeta desde la óptica integral, es decir del todo, para lo cual es indispensable involucrarlos en la construcción de una “Civilización del Amor” cuya identidad cultural se basa en la genuina cultura de la vida.

Con esto concluyo con la segunda parte de mi charla destinada al juzgar, para dar paso a su etapa conclusiva enumerando una serie de ideas que nos permitan pasar al actuar.

Como padre de familia, muchas veces me he preguntado qué mundo quiero para mis hijos, que medio ambiente y qué tipo de sociedad les heredare. Pero no basta con pensarlo, ni en darles discursos sobre la sociedad, el medio ambiente y sus problemas, si yo mismo no hago acciones concretas tendientes a mejorar nuestro entorno social y natural.

En este sentido, deseo compartir con ustedes algunas de las acciones que a mi juicio debemos realizar de manera personal cada uno de nosotros:

1ª. Los graves problemas ambientales que hemos ocasionado, exigen un cambio profundo en nuestro estilo de vida, pero sobre todo en nuestra mentalidad típica de la moderna sociedad de consumo, para adoptar una nueva manera de vivir más respetuosa con la naturaleza y realizando un consumo más austero que se traduzca en una mayor responsabilidad y solidaridad con la tierra, y con nuestros hermanos particularmente con los más pobres.

2ª Hay que volver a considerar y promover por todos los medios a nuestro alcance a la familia como el santuario de la vida por excelencia. Si queremos promover la Cultura de la Vida y la construcción de la Civilización del Amor, el papel de la familia es determinante e insustituible, pues está llamada a anunciar, celebrar y servir al evangelio de la vida.

3ª Debemos tener siempre presente que la cuestión ecológica no es solo una cuestión científica, filosófica, política o estética. Es por encima de todo una cuestión moral, que a los cristianos no solo nos debe “pre-ocupar” sino que también, y sobre todo, nos debe “ocupar” desde una respuesta de fe.

4ª Buscar y aportar nuevas ideas para la construcción de un nuevo modelo de desarrollo, entre cuyas características este basado en una ética de la responsabilidad, fundamentado en el evangelio, la justicia, la solidaridad, que supere la lógica utilitarista e individualista, que no se somete a los poderes económicos y tecnológicos y que como resultante es plenamente respetuoso de la naturaleza y sus recursos. (Gran parte de esto fue planteado en la IV Conferencia del Episcopado Latinoamericano en Santo Domingo en 1992)

5ª Fomentar la convivencia entre todos los miembros de la familia y si adicionalmente la hacemos en espacios al aire libre, se convierten en maravillosas oportunidades para estrechar los lazos y la comunicación entre padres e hijos y hermanos; para sensibilizar, enseñar y fomentar un genuino aprecio y respeto por la naturaleza, porque son experiencias prácticas. Ejemplo de lo anterior es, emprender una excursión para subir algún cerro, hacer una camita por un sendero o inclusive realizar un campamento familiar.

Creo que con estas cinco acciones iníciales, tenemos material de sobra para trabajar, por ello, deseo concluir mi intervención, no sin antes compartir con ustedes esta reflexión final:

Es cierto que el panorama actual en la materia ambiental y el ámbito familiar no es del todo halagador, que son muchos los problemas y retos que tenemos por delante, pero también es cierto que como cristianos, como discípulos de Jesucristo, estamos llamados a ser portadores de buenas noticias para la humanidad y no profetas de la desventura.

Para todos los que estamos aquí reunidos en este encuentro, es claro que hay mucho por hacer; mucho por cambiar; pero igualmente claro es, que tenemos la obligación de ver el futuro con esperanza y confianza en Dios, inspirados también en un espíritu de cooperación con él.

Y para cooperar con Dios, se hace necesario que ante el pesimismo persistente de muchos, ante la desesperanza de otros tantos, seamos capaces de mostrarle al mundo los múltiples motivos que tenemos los cristianos para ser optimistas. Frente a las razones que muchos argumentan para perder la Fe, están todas nuestras razones para recuperarla.

El gran reto, la gran oportunidad que se nos presenta, es como lo señala el documento Eclesia en Europa: “Servir al Evangelio de la esperanza” que quiere decir “empeñarse de un modo nuevo en un correcto uso de los bienes de la tierra, llamando la atención para que, además de tutelar los ambientes naturales, se defienda la calidad de la vida de las personas y se prepare a las generaciones futuras un entorno más conforme con el proyecto del Creador”.

Si asumimos a cabalidad este reto, sin duda alguna nuestras familias serán las portadoras de buenas noticias, convirtiéndose a su vez en evangelizadoras de muchas otras familias, y como bautizados que somos, estaremos contribuyendo en la edificación de una sociedad según los criterios del evangelio respetuosa y protectora de la naturaleza y el medio ambiente.

Muchas Gracias

miércoles, 21 de octubre de 2009

Se reune el Observatorio Ciudadano de Protección Ambiental de Querétaro, con Senador Tamborrel y Secretario de Desarrollo Sustentable


En días pasados Enrique Uribarren y América Vizcaíno, Presidente y Secetaria del Observatorio Ciudadano de Protección Ambiental de Querétaro, A.C., respectivamente, participaron en la Reunión convocada por el Senador Guillermo Tamborrel Suarez, del Partido Acción Nacional, la cual tenía por objeto abordar la problemática de Peña Colorada.

En dicha reunión participaron también el nuevo Secretario de Desarrollo Sustentable del Estado, el Ing. Tonatiuh Salinas, así como los titulares de la Delegaciones de SEMARNAT y PROFEPA en el Estado.

La opinión generalizada de los participantes de la misma fue, que existen los argumentos técnicos y científicos suficientes para considerar Peña colorada como un zona de protección que puede ser declarada bajo alguna categoría de Área Natural Protegida

Es importante destacar que Peña Colorada es considerada como el área verde más grande de la zona conurbada de Querétaro y es esencial por los distintos servicios ambientales que presta, como el de regular el clima local, particularmente, en este tiempo, en que el país está tratando de poner en marcha medidas que eviten incrementar el cambio climático.

jueves, 15 de octubre de 2009

SE REUNEN MIEMBROS DEL OBSERVATORIO CIUDADANO DE PROTECCION AMBIENTAL DE QUERETARO CON EL PRESIDENTE DEL CONGRESO DEL ESTADO

El presidente del Observatorio Ciudadano de Protección Ambiental de Querétaro, Enrique Uribarren Castro, y la Secretaría de la Asociación, América Vizcaíno Sahagún, sostuvieron el día de hoy una reunión en la sede del Poder Legislativo con el Presidente de la mesa directiva del Congreso del Estado, el Diputado Hiram Rubio García.

En este primer encuentro, los integrantes del Observatorio Ciudadano de Protección Ambiental de Querétaro, le presentaron al Diputado Rubio una serie de planteamientos para el fortalecimiento a nivel estatal de la gestión ambiental, y la adecuada protección de los recursos naturales de la entidad desde el marco legal.

En este sentido fue comentada la propuesta de incorporar la visión de Desarrollo Humano Sustentable en todas las leyes del Estado, lo que a su vez permitiría establecerlo como un eje trasversal y fundamental para todas las áreas administrativas y operativas del gobierno.

De igual forma se hablo sobre la posibilidad de que el Congreso del Estado haga un exhorto a las administraciones municipales para que en su ley de ingresos y presupuesto de egresos, contemplen un rubro destinado exclusivamente para las áreas responsables de la gestión ambiental, buscando con ello, implementar acciones en beneficio del medio ambiente desde el ámbito local.

Adicionalmente, Uribarren Castro y Vizcaíno Sahagún hicieron una breve exposición de la problemática actual que presenta la zona ecológica de Peña Colorada, solicitando al Diputado Rubio, su solidaridad y acciones que permitan preservar esta importante área para la zona conurbada de Querétaro.

Finalmente, el Diputado Rubio ofreció establecer un canal de comunicación directa con los integrantes del Observatorio Ciudadano de Protección Ambiental de Querétaro, que permita iniciar una serie de trabajos tendientes a perfeccionar el marco legal en materia ambiental que se traduzcan también en acciones en beneficio del medio ambiente y por ende, de todos los queretanos.

jueves, 1 de octubre de 2009

EXISTE CONFIANZA EN QUE LAS NUEVAS AUTORIDADES ESTATALES Y MUNICIPALES INCORPORARAN AL DESARROLLO HUMANO SUSTENTABLE EN SU VISION DE GOBIERNO

Los integrantes del Observatorio Ciudadano de Protección Ambiental de Querétaro, A.C., deseamos extenderles nuestra más sincera FELICITACION por el encargo que el día de hoy asumen a

LIC. JOSE CALZADA ROVIROSA
GOBERNADOR CONSTITUCIONAL DEL ESTADO DE QUERETARO

ROSENDO ANAYA AGUILAR
PRESIDENTE MUNICIPAL DE AMEALCO DE BONFIL

ANGEL TORRES BALDERAS
PRESIDENTE MUNICIPAL DE ARROYO SECO

ANTONIO PEREZ BARRERA
PRESIDENTE MUNICIPAL DE CADEREYTA DE MONTES

VICTOR ALONSO MORENO
PRESIDENTE MUNICIPAL DE COLON

CARMELO MENDIETA OLVERA
PRESIDENTE MUNICIPAL DE CORREGIDORA

RUBEN GALICIA MEDINA
PRESIDENTE MUNICIPAL DE EL MARQUES

HIPOLITO MARTINEZ ARTEAGA
PRESIDENTE MUNICIPAL DE EZEQUIEL MONTES

JOSE SAUL AYALA CABRERA
PRESIDENTE MUNICIPAL DE HUIMILPAN

MIGUEL ANGEL TORRES OLGUIN
PRESIDENTE MUNICIPAL DE JALPAN DE SERRA

GABINO LANDA RUBIO
PRESIDENTE MUNICIPAL DE LANDA DE MATAMOROS

ALONSO LANDEROS TEJEIDA
PRESIDENTE MUNICIPAL DE PEDRO ESCOBEDO

ELEAZAR MURGUIA OLVERA
PRESIDENTE MUNCIPAL DE PEÑAMILLER

JORGE ENRIQUE RESENDIZ MARTINEZ
PRESIDENTE MUNICIPAL DE PINAL DE AMOLES

FRANCISCO DOMINGUEZ SERVIEN
PRESIDENTE MUNICIPAL DE QUERETARO

J. BELEN LEDESMA LEDESMA
PRESIDENTE MUNICIPAL DE SAN JOAQUIN

GUSTAVO NIETO CHAVEZ
PRESIDENTE MUNICIPAL DE SAN JUAN DEL RIO

RAUL ORIHUELA GONZALEZ
PRESIDENTE MUNICIPAL DE TEQUISQUIAPAN

DANIEL DE SANTIAGO LUNA
PRESIDENTE MUNICIPAL DE TOLIMAN

Adicionalmente, para Enrique Uribarren Castro, presidente del Observatorio Ciudadano de Protección Ambiental de Querétaro, la ciudadanía queretana habló clara y contundentemente en el pasado proceso electoral, y ha puesto en las manos de todos los nuevos gobernantes un mandato inequívoco para hacer del Estado de Querétaro y de sus Municipios una entidad con un desarrollo económico, social y ambiental modelo a nivel nacional.

Por ello, Uribarren señalo que los miembros del Observatorio se encuentran optimistas y con renovada esperanza de que en sus respectivas responsabilidades, las nuevas autoridades del Estado, al menos incorporaran los siguientes puntos:

En el Plan Estatal de Desarrollo 2009–2015, así como de los Planes de Desarrollo Municipal 2009–2012, se incorporará la visión y criterios del DESARROLLO HUMANO SUSTENTABLE como un eje trasversal y fundamental para todas las áreas administrativas y operativas del gobierno.

La elaboración e implementación de una Programa de mitigación y adaptación a los efectos del Cambio Climático para el Estado de Querétaro y sus Municipios.

El establecimiento de un sistema de Indicadores Ambientales a nivel Estatal y Municipal.

La planeación del terreno municipal y los cambios de uso de suelo se ajustarán siempre a los criterios establecidos en los Programas de Ordenamiento Ecológico Territorial del Estado de Querétaro.

Se consolidarán las áreas naturales protegidas de carácter estatal y municipal, estableciendo un sistema estatal de áreas naturales protegidas que elabore los programas de manejo para cada una de ellas.

Se promoverá la inversión que permita realizar las obras de infraestructura ambiental que el Estado requiere para el saneamiento de aguas residuales, así como para el manejo adecuado de los residuos sólidos urbanos, especiales y peligrosos.

De igual manera señalo “Podemos anticipar que la tarea que les espera no será fácil. Pero igualmente estamos convencidos de que con determinación, empeño y trabajo conjunto con la sociedad, todo será posible”.

Para finalizar, Uribarren comento que “Confiamos que en ésta nueva etapa que inicia bajo el esquema de concurrencia y suma de esfuerzos entre gobierno y sociedad, podremos finalmente lograr el establecimiento de un modelo de Desarrollo Humano Sustentable, que nos permita heredar a las futuras generaciones de queretanos, un mejor estado del que a nosotros nos ha tocado vivir”.